Esta decisión se produce apenas un día antes de que el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) de Argentina divulge la inflación de marzo, que se espera que sea inferior a las cifras de meses anteriores, aunque todavía será muy superior respecto al resto de países de la región de América Latina.
Al cierre de febrero, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de Argentina cayó hasta el 13,2% frente al 20,6% del pasado enero. Esta cifra supuso dejar atrás los elevados niveles de los dos meses anteriores, cuando se llegó al 25,5% de inflación mensual (el caso de diciembre).
Por su parte, la inflación interanual fue del 276,2% interanual en febrero, 26 puntos porcentuales más que en enero. Con todo, este aumento se pudo interpretar como una ralentización respecto a los meses anteriores, en los que se dieron subidas de 51 y 42 puntos porcentuales, respectivamente.
La decisión del banco central de Argentina va en línea con las estimaciones del mercado, ya que se espera que el dato mensual correspondiente al mes de marzo y que se conocerá este viernes sea inferior al de los últimos meses.
En los últimos días, el ministro de Economía del país austral, Luis Caputo, ha especulado con que la inflación mensual se ubique en el 10% en marzo. Si bien, anteriormente, el presidente de Argentina, Javier Milei, apuntó que marzo sería complicado en términos inflacionarios por el factor estacional, apuntando hacia abril como un mes en el que se registrará un buen dato.
Desde que Javier Milei asumió el cargo en diciembre, el organismo central ha aplicado recortes en la tasa de política monetaria por un total de 6.300 puntos básicos, desde el 133% en el que se ubicaba anteriormente.