Ferran Font, director de Estudios del portal inmobiliario pisos.com, llama a la calma y cuestiona el impacto real de esta medida en el mercado, pues en 2022, último año del que se disponen de cifras oficiales, tan solo se concedieron 136 ‘Golden Visa’.
Una década después de su entrada en vigor de la mano del Ejecutivo del Partido Popular, el actual presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado este lunes el fin de las ‘Golden Visa’, una ley que permitía a los inversores extranjeros obtener un permiso de residencia si compraban una vivienda valorada en 500.000 euros o más.
Desde el portal inmobiliario pisos.com, su director de Estudios, Ferran Font, hace una llamada a la prudencia y cuestiona el impacto que puede llegar a tener esta medida una vez entre en vigor: “desde el punto de vista del mercado en general, y aunque sea un momento donde la compra por parte de extranjero se sitúa alrededor del 15% y está en máximos históricos, el impacto que pueda tener será relativo”.
El experto recurre a las últimas cifras oficiales disponibles de ‘Golden Visa’, correspondientes al año 2022, para defender su postura, pues en ese año tan solo se concedieron 136 de estos permisos, lo que supone, aproximadamente, un 0,14% del total de compras por parte de extranjeros a nivel nacional.
“Esta iniciativa, que se inició en 2013, hasta el 2022, ha beneficiado principalmente a compradores de origen chino o ruso; y en los mercados donde se ha visto más actividad de este tipo han sido Barcelona, Madrid, Málaga, Alicante y Palma de Mallorca”, señala el experto.
Por el momento, el Ejecutivo de Pedro Sánchez ha confirmado que este martes, 9 de abril, se estudiará en el Consejo de Ministros un informe presentado por el Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana para poner fin a la ‘Golden Visa’, ayudando así a “garantizar que la vivienda sea un derecho y no un mero negocio especulativo”. Las potenciales fechas de la entrada en vigor de este cambio de normativa todavía no han sido puestas sobre la mesa y serán discutidas en las próximas semanas.