En concreto, esa diferencia se situó en -11,8 puntos, con 15,5% de establecimientos empresariales que piensan que la marcha de su negocio será favorable entre octubre y diciembrey 27,3% que tiene expectativas en sentido contrario.
El retroceso de la confianza empresarial registrado en el cuarto trimestre se da en un contexto marcado por la guerra en Ucrania, una elevada tasa de inflación, altos precios de las materias primas y subidas de los tipos de interés.
A mitad camino entre pesimistas y optimistas, el porcentaje de empresarios que opinan que su negocio marchará de manera normal ha aumentado hasta el 57,2%.