"Se trata de un contrato mixto con un presupuesto máximo en el cual el contratista se obliga a ejecutar el objeto (del contrato) de forma sucesiva y por precio unitario, sin que el número total de entregas o prestaciones estimadas en el objeto del contrato se defina con exactitud al tiempo de celebrar este por estar subordinadas las mismas a las necesidades de Incibe", detalla la adjudicación.
La duración del contrato es de 36 meses, con fecha límite del 30 de junio de 2026, y los pedidos de suministro a lo largo de la vigencia del mismo distintos del primer pedido estarán "sujetos a las necesidades" del Instituto Nacional de Ciberseguridad (Incibe).
El contrato ha sido adjudicado por la dirección general del Incibe --sociedad mercantil estatal propiedad del Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital-- y se ha negociado sin publicidad "por exigirlo la protección de intereses esenciales para la seguridad del Estado", añaden los documentos publicados en el portal de contratación.
En este contexto, Telefónica se ha impuesto a la unión temporal de empresas (UTE) compuesta por Fujitsu y Vodafone, que también había presentado una oferta para este contrato público.