No es un producto “enlatado”, con videos ya grabados sino un bootcamp intensivo online (también presencial, en Coruña) donde los estudiantes desarrollan en 16 semanas las habilidades que demanda el mercado para programación full stack, es decir, conocimientos de programación back end (la arquitectura) y front end (la usabilidad o interfaz de usuario).
“Nuestro ratio de empleabilidad alcanza hasta 90% de efectividad -explican Pedro José Gallardo Durán y Marcelino Cerón Soria, de Hack a Boss-; y un diferencial es que permitimos realizar el bootcamp sin coste alguno: pagas cuando encuentres trabajo, no antes”.
La fórmula de Hack a Boss es posible por sus acuerdos con empresas de primer nivel y alta demanda de talento en ese segmento como Idealista, Jobandtalent o NTT Data entre otras muchas con necesidades de contratación. Precisamente con NTT Data -además- Hack a Boss ha desarrollado otro bootcamp enfocado en Data Science, otro área que cada vez demanda más profesionales
Al ser clases “en directo”, las formación de Hack a Boss permite hacer preguntas, interactuar en tiempo real y generar un networking indispensable para lograr adherencia y continuidad en las clases.
“Otro valor añadido de Hack a Boss es impartir módulos de habilidades blandas”, explican en relación que no sólo hay que saber cómo programar una solución, cómo hacerla ver “linda” y fácil de usar, sino también cómo interactuar con los equipos de trabajo y los clientes, sobre todo en tiempos donde las personas raras vez confluyen en un mismo espacio de trabajo.
Fundada en Galicia por Pablo Rodríguez, los cursos de Hack a Boss ya han formado 800 alumnos a nivel nacional. Sólo este 2022 terminarán con 300 egresados y aspiran a duplicar y llegar a 600 en 2023.
- Se escucha que las grandes compañías de tecnología están empezando a achicar sus plantillas, ¿no hay una amenaza por ese lado? - preguntamos.
- Es verdad que Facebook y Google están prescindiendo de gente, pero sigue haciendo falta una gran cantidad de desarrolladores en general. Además, en España hay muchos sectores que vienen rezagados en su digitalización y la demanda aún es mayor.
“Nuestra experiencia indica que cualquier persona puede aprender a programar -explican desde esta empresa gallega-; hacemos dos test iniciales y luego las 16 semanas de capacitación sí demandan dedicación… no es un cursito”.
El valor de estos bootcamps van acorde a su salida laboral: rondan entre los 5.500 y los 6.000 euros, con la facilidad de pagar “solo cuando terminan sus estudios y encuentren empleo, con la posibilidad de elegir modalidades de pago fraccionado”, añaden sobre esta modalidad conocida como ISA (Income Shared Agreement)