"El mercado se está calentando debido a que hay una gran demanda por comprar y poco stock disponible. Venimos de una gran actividad inmobiliaria en 2021 que ha sido frenética. España ha batido récord de compraventas y ha alcanzado el mejor año hipotecario de la última década. Sin embargo, las cifras están muy alejadas de los excesos del 2007 para que nos encontrásemos cercanos a una burbuja. Según el Índice inmobiliario Fotocasa todavía estamos un 34% por debajo de los precios máximos que alcanzamos en el periodo del boom", analiza María Matos, portavoz de Fotocasa.
Aún así, la percepción sobre la proximidad de una burbuja inmobiliaria ha pasado de preocupar al 38% de los españoles en febrero de 2021 al 46% en el mismo mes de 2022, como muestran los datos de Fotocasa.
Aún así, en el estudio vuelve a imponerse la visión de que comprar vivienda es una buena inversión, como responde el 63% de los particulares encuestados. En febrero de 2021, la valoración que se daba a esta cuestión era de 7,1 puntos, mientras que en septiembre se ese mismo año cayó a 6,9 puntos, y en febrero de 2022 subió da los 7 puntos.
La compra de vivienda también se presenta como una opción a futuro, ya que vuelve a crecer el porcentaje de españoles que considera que un piso es la mejor herencia para sus hijos. En septiembre de 2021, un 46% de los encuestados veía la herencia de vivienda como una buena opción, mientras que en febrero de 2022 subió al 51%, con una importancia media de 6,3 puntos sobre 10.
Por otro lado, el encarecimiento de los alquileres invita a plantearse la compra como una opción más acertada. Entre los encuestados para el estudio de Fotocasa crece la opinión de que vivir de alquiler es tirar el dinero.