El clásico restaurante recupera una de sus tradiciones más castizas, el cocido madrileño. Un plato que el rey D. Alfonso XIII solía disfrutar cada jueves en el hotel y que hoy, sus fogones traen al presente.
La sencillez de un plato nunca estuvo reñida con la cocina de alto nivel de Mandarin Oriental Ritz, Madrid, como demuestra Sergio de la Plata, Head Chef de Palm Court, apostando por la receta original que lleva realizándose en el hotel desde sus orígenes.
Con los ingredientes más selectos y de la más alta calidad cocinados a fuego lento durante horas, esta propuesta está destinada a ser la estrella de la temporada.
Los tres vuelcos que componen el cocido se sirven en bandeja de plata, tal y como se hacía tradicionalmente en el hotel.
El primer vuelco lo protagoniza una exquisita sopa de fideo fino cabello de ángel, cocinada a fuego lento a base de costilla, hueso de espinazo y de caña de jamón de bellota de salamanca, además de gallina para aportar consistencia, chorizo y morcilla. Los garbanzos pedrosillanos son la estrella del segundo vuelco, acompañados de las verduras -patata, col o berza, zanahoria y nabo-. El tercer vuelco completa esta experiencia con tocino entrevetado, chorizo y morcilla jarrete, morcillo con su tuétano procedente de ternera de Ávila y la carne de gallina. Además, este vuelco presenta las clásicas pelotas, realizadas con masa de pan y carne deshilachada del cocido.
Para armonizar todos los sabores proponen un maridaje con el vino madrileño El Regajal D.O. Ca. Madrid, un vino tinto envejecido 13 meses en barrica de roble francés procedente de Aranjuez.
Esta cita gastronómica muy castiza en el corazón de Madrid, tiene el valor de € 55.