El banco señaló que cerca de cuatro millones de sus clientes utilizan este sistema de pagos, realizando en torno a 12 millones de operaciones.
El aplazamiento o fraccionamiento también puede realizarse en compras en los 35.000 comercios españoles que cuentan con la posibilidad de pagar con Bizum.
La entidad explicó que busca dar flexibilidad a sus clientes a la hora de pagar, ayudando a que controle sus gastos. "La compra a plazos puede resultar muy conveniente, ya que facilita el consumo, pero dentro de los límites que cada persona tiene asignada de acuerdo a su perfil y capacidad económica", afirmó BBVA.
Esta nueva forma de aplazamiento se une a las que ya ofrece BBVA, como las compras realizadas con la tarjeta de débito o el pago de impuestos, adeudos, recibos o transferencias.
Además, la entidad lanzó hace unas semanas la nueva tarjeta Aqua, que permite fraccionar el pago hasta tres meses, sin intereses ni comisiones de aplazamiento, irrumpiendo así en la modalidad 'Buy now, pay later' (cuya traducción es 'compra ahora, paga después').