Aunque el precio ha retrocedido un 7% desde su máximo histórico de 123.200 dólares alcanzado hace unas semanas, la estructura de mercado sigue siendo claramente alcista, con máximos y mínimos crecientes.
Actualmente el precio cotiza en 114.680 dólares. Llegó a tocar los 112.000 dólares —el anterior máximo histórico— antes de rebotar. Una nueva prueba de este nivel podría confirmarlo como soporte y sentar las bases para el próximo impulso al alza.
Por su parte, los altcoins también corrigieron tras varias semanas de fuertes subidas. La capitalización total del mercado cripto, excluyendo el bitcoin, cayó en 115.000 millones de dólares, un descenso del 7,5 %. Los memecoins fueron los más castigados, con retrocesos de doble dígito. Sin embargo, estos precios más bajos podrían suponer una oportunidad para los inversores más especulativos que busquen aprovechar la caída.
En cuanto a la semana entrante, no se esperan grandes referencias macroeconómicas que puedan provocar movimientos bruscos.
Sí podría haber cierta volatilidad mientras los mercados valoran el impacto de los nuevos aranceles recíprocos anunciados por el presidente Trump, que entrarán en vigor el 7 de agosto para los países que aún no hayan firmado un acuerdo comercial con Estados Unidos. Su efecto sobre la economía global aún está por determinar.
Criptoactivos más destacados
Los memecoins fueron los más penalizados la semana pasada. $BONK cayó un 22 %, y $FARTCOIN, un 30 %.
En sentido contrario, $IP subió un 12 %, impulsado por el anuncio de Grayscale —la mayor plataforma de inversión en activos digitales del mundo— de que lanzará el Grayscale Story Trust. Este nuevo vehículo dará acceso a inversores acreditados al token IP, nativo de la red Story.