Los resultados destacan que, para que una empresa sea atractiva para un profesional, ha de asegurar un paquete de compensación competitivo que incluya un salario justo y beneficios atractivos, aunque la 'Generación Z' otorga menos importancia a estos factores, pero sí muestra mayor interés en la reputación y la calidad de formación ofrecida por la empresa.
Además, explican desde Randstad, es fundamental que las empresas prioricen la conciliación entre la vida laboral y familiar, como pueden ser políticas flexibles de horarios y opciones de teletrabajo.
También es esencial que exista un ambiente laboral positivo y colaborativo en la empresa, que fomente el crecimiento profesional y el bienestar de los empleados.
Asimismo, implica proporcionar oportunidades de desarrollo profesional y crecimiento, así como valorar la diversidad y la equidad dentro de la organización.
Los resultados señalan que, en concreto, la Generación Z es relativamente más propensa a dejar su empresa como resultado de una "falta de alineación con sus valores personales" y por no ser recompensada equitativamente debido a su género, etnia o religión.
Randstad ha obtenido las respuestas a partir de los casi 163.000 encuestados en todo el mundo, más de 8.300 a nivel nacional. El estudio incluye estudiantes y personas con y sin trabajo en edades comprendidas entre los 18 y la edad de jubilación, pero con mayor incidencia del grupo de edad de 25 a 44 años, sin incluir la de los propios empleados de las empresas.