“La IA abre un interesantísimo y complejo debate en el ámbito de la inclusión laboral, produciéndose una ambivalencia; por un lado, tiene una gran capacidad para sortear barreras históricas que tradicionalmente han encontrado las personas con discapacidad; sin embargo, si el conjunto de datos utilizados para su entrenamiento contiene sesgos o refleja desigualdades persistentes en la sociedad, estos sistemas pueden aprender y perpetuar dichos sesgos en sus resultados. Es por ello fundamental adoptar prácticas de desarrollo ético de la IA, como la selección cuidadosa de los datos de entrenamiento, el monitoreo constante de sesgos o la promoción de la diversidad en los equipos de desarrollo, para que los algoritmos sean inclusivos”, destaca Francisco Mesonero, DG de la Fundación Adecco.
La mayor parte de los contratos laborales suscritos por personas con discapacidad en Cataluña (60%) se suscriben en el ámbito protegido y solo un 40% en la empresa ordinaria (entornos convencionales de trabajo). El reto es lograr que las Nuevas Tecnologías y la Inteligencia Artificial se conviertan en un acelerador del empleo en las empresas ordinarias, y nunca en un freno.
Algunas claves para desarrollar una IA inclusiva son: aplicar principios de diseño universal que aseguren la accesibilidad, introducir ejemplos positivos de personas con discapacidad en los datos de entrenamiento o el monitoreo constante para consolidar modelos de aprendizaje inclusivos.
Por duodécimo año consecutivo, el Observatorio de la Vulnerabilidad de la Fundación Adecco presenta el informe Tecnología y Discapacidad, con la colaboración de Keysight Technologies Sales Spain SLU. Se trata de un análisis que, durante toda su trayectoria, ha profundizado en el papel de las nuevas tecnologías como grandes aceleradoras del proceso de inclusión social y laboral de las personas con discapacidad, en una sociedad eminentemente digitalizada.
De nuevo, este trabajo se presenta próximo al 15 de julio, Día Internacional de las Tecnologías Apropiadas, un término que hace referencia a los avances tecnológicos que contemplan la dimensión ética, cultural, social, económica y medioambiental en su planteamiento. La asociación de los conceptos tecnología y discapacidad encaja a la perfección en este marco, al ser las personas con discapacidad un target estratégico para un desarrollo tecnológico inclusivo, que no deje a nadie atrás, como reza la máxima de la Agenda 2030.
El presente informe cobra una importancia especialmente significativa en este año 2023, en el que se ha producido el gran despegue y democratización de la Inteligencia Artificial (IA), gracias a la irrupción de ChatGpt y otros sistemas inteligentes, que abren las puertas a otros similares y alumbran una profunda transformación en todos los ámbitos, y particularmente en el empleo. Una revolución que comporta indudables oportunidades en el mundo laboral, pero también algunos riesgos, que en el presente informe hemos querido visibilizar.
Para las conclusiones de este trabajo se ha encuestado a 300 personas con discapacidad en búsqueda de empleo y se han tenido en cuenta, además, otros datos oficiales como las cifras de contratación publicadas mensualmente por el Servicio Público de Empleo Estatal.