El mal humor, la irritabilidad y las ganas de no hacer nada son los protagonistas de nuestro estado de ánimo en los días calurosos, lo que afecta a las relaciones de pareja, que suelen resentirse. La mayoría de l@s encuestad@s, sienten mayor irritabilidad (el 82%), o nerviosismo (67%) e incluso fatiga (42%) cuando las temperaturas alcanzan los picos más altos Y, lo más preocupante, casi la mitad de ell@s afirma tener menos ganas de hacer el amor con su cónyuge.
Pero los meses de julio y agosto son los que más encuentros sexuales tienen l@s español@s. Otro dato que se desprende del estudio de Gleeden es que más del 40% de los matrimonios deciden dormir separados cuando aprieta el calor. De hecho, las respuestas también ponen de relieve que más del 55% de encuestad@s preferiría no ir de vacaciones con su pareja y familia sino con su amante (33%) o sol@s (22%).
Se está cosechando el territorio propicio para la infidelidad: en verano se liga más y es más fácil conocer gente nueva… y el 63% de encuestad@s afirma esperar mucho de esta estación, especialmente en cuanto a relaciones sexuales. De hecho, el 60% de encuestad@s, en su mayoría hombres, ha afirmado que el calor les hace subir la libido y, por tanto, tener más ganas de sexo, especialmente con sus amantes. No en vano, más de la mitad de los españoles admite estar más activo sexualmente durante los meses de verano: la relajación y la desconexión veraniega hace que l@s español@s estemos más abiertos a posibles encuentros sexuales con nuevas personas.