La Agenda 2030 se sustenta en los principios de:
-
Universalidad: los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) comprometen a todos los países del mundo, con independencia de su nivel desarrollo.
-
Responsabilidades compartidas: aunque los gobiernos son los principales responsables de su cumplimiento, exige la implicación de todos los actores del desarrollo y requiere un diálogo multinivel y multiactor.
-
Sostenibilidad: en el ámbito social, económico y medioambiental.
Además, está pensada con un enfoque integrador para evitar su compartimentación por visiones sectoriales.
La Agenda 2030 da continuidad a los Objetivos de Desarrollo del Milenio (2000), una hoja de ruta con base en los valores y principios acordados por los Estados miembros en la Cumbre del Milenio del año 2000.
Algunos aprendizajes preliminares
El desarrollo sostenible se identifica, en primer lugar, con retos medioambientales y, en menor medida, con retos económicos y sociales. Los ODS relacionados con aspectos transversales, altamente integrados en la agenda política a nivel internacional, son los más interesantes para el tejido productivo. Destacan el ODS 8, de trabajo decente y crecimiento económico, y el ODS 5, de igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres.
El conocimiento y la aplicación de la Agenda de Desarrollo Sostenible va a dos velocidades, en función del tamaño de las empresas. Las grandes han sido pioneras en su conocimiento y aplicación de los ODS. Así, casi todas ellas los han integrado en sus estrategias de negocio.
Una realidad muy diferente es la de las pymes, con bajos niveles de conocimiento e implementación de los ODS. Además, las empresas más pequeñas tienen más dificultades y utilizan gran parte de su tiempo y recursos en la gestión del día a día (facturas, gestiones, trato con proveedores y clientes, etcétera).
La importancia de lo local: el caso Madrid
El municipio de Madrid tiene una población activa de más de 1 700 000 personas, un tejido productivo con más de 300 000 empresas y un PIB per cápita de 45 461 euros. Es una ciudad de servicios, en la que destacan los sectores de la información y los servicios profesionales, el comercio y la hostelería y la Administración pública.
Su tejido productivo se caracteriza por el pequeño tamaño de las empresas. El 95 % de ellas tiene menos de 3 trabajadores, aunque en Madrid se ubican la gran mayoría de las grandes corporaciones.
En este contexto, el Ayuntamiento madrileño aprobó en marzo de 2021 la Estrategia de Localización de los Objetivos de Desarrollo Sostenible en la ciudad de Madrid. Esta iniciativa tiene 6 políticas palanca. La más importante para el tejido productivo es la de innovación y economía inclusiva y sostenible, que tiene una vinculación directa con los ODS 8, de crecimiento económico y trabajo decente, y 9,de infraestructuras, industria e innovación.
La Agenda 2030 y el tejido productivo de Madrid: un reto pendiente
Existen varios estudios sobre la incorporación de la Agenda 2030 en el tejido productivo madrileño. Destaca el de la Confederación Empresarial de Madrid y el informe publicado en mayo de 2022 por el Pacto Mundial sobre las empresas españolas y la Agenda 2030.
En el equipo de investigación del Grupo de Estudio de las Transformaciones de la Economía Mundial (GETEM) de la Universidaad Autónoma de Madrid (GETEM-UAM) hemos continuado esta línea de investigación, extrayendo las siguientes conclusiones preliminares:
-
El 77,5 % de las organizaciones encuestadas afirman conocer los ODS mientras que el 22,5 % los desconocen. Solo el 17,8 % tienen integrados los ODS en su estrategia de negocio.
-
El ODS 5, de igualdad de género, y el ODS 8, de trabajo decente y crecimiento económico, son los más importantes para los encuestados. Igualdad y trabajo decente han sido ampliamente recogidos en otras agendas internacionales. Asimismo, las empresas muestran interés por el ODS 12, de producción y consumo responsables; el ODS 3, de salud y bienestar; y el ODS 10, de reducción de desigualdades.
-
Pese al conocimiento general de la Agenda 2030, hay poco conocimiento del plan del Ayuntamiento de Madrid para alinear su estrategia de desarrollo sostenible con los ODS y la Agenda 2030. El 58,9 % declara no conocerla ni haber oído hablar de ella y solo un 5,6 % la conoce. Además, el desconocimiento crece a medida que se reduce el tamaño de la empresa.
-
El tejido productivo madrileño muestra interés por el desarrollo sostenible. Se demandan incentivos y formación en dicha área.
-
Las fortalezas del tejido empresarial entroncan fácilmente con los ODS. Destacan: las medidas de conciliación, creación de empleo y empleo de calidad (vinculadas al ODS 8 de crecimiento económico); las alianzas con otras empresas, clientes o instituciones (relacionadas con el ODS 17); los avances tecnológicos y digitalización (ligados al ODS 9); el consumo responsable (relacionado con el ODS 12); la importancia de la igualdad (vinculada a los ODS 5 y 10).
-
Entre las debilidades se encuentran el alto coste y la falta de fondos así como recursos humanos, productivos o de infraestructuras para implementar la Agenda 2030. En este sentido, los fondos europeos Next Generation y el Plan de Recuperación, Resiliencia y Transformación de la ciudad de Madrid pueden ser de utilidad para superar estas debilidades.
-
El sector empresarial ve los ODS como una oportunidad para su negocio (por incremento de prestigio, establecimiento de alianzas, aumento de competitividad).
-
Las empresas se identifican como agentes de cambio, con capacidad para incidir en la forma de actuar de otros y de contribuir a la mejora de la sociedad.
Lo que queda por hacer
El desconocimiento de los empresarios madrileños de la estrategia elaborada por el Ayuntamiento de localización de los ODS es el primero de los retos a abordar. Sin conocer la estrategia, poco se puede avanzar en ella.
Asimismo, otro de los grandes problemas que se han identificado es la necesidad de formación relativa al desarrollo sostenible y la Agenda 2030. Los agentes económicos, una vez que conocen la Agenda, no saben cómo trasladarla a su día a día.
Queda mucho aún por hacer para que el tejido productivo madrileño participe en el reto ineludible del desarrollo sostenible.
Este artículo es una adaptación de la carta extraordinaria del GETEM número 2 (junio 2022), que avanza algunos resultados del proyecto de investigación “La Agenda 2030 y el tejido productivo de Madrid: el papel de las políticas públicas municipales para dinamizar al sector empresarial madrileño en su contribución a los ODS en el contexto del covid-19”.
Ángeles Sánchez Díez, Dpto. Estructura Económica y Economía del Desarrollo. Coordinadora del Grupo de Estudio de las Transformaciones de la Economía Mundial (GETEM), Universidad Autónoma de Madrid and Sofía de las Nieves García Gámez, Profesora contratada doctora, Universidad Autónoma de Madrid
Este artículo fue publicado originalmente en The Conversation. Lea el original.
Tu opinión enriquece este artículo: