Un adiós tras trece años de travesía
La salida de Chema Alonso, adelantada por varios medios antes del Mobile World Congress y confirmada por el propio Alonso en LinkedIn, marca el cierre de una era en la compañía. Su fichaje en 2012, tras la compra de su empresa Informática 64 (luego ElevenPaths), simbolizó la apuesta por un perfil técnico ajeno al tradicional ejecutivo de corbata y MBA. Con su inconfundible gorro azul, su discurso cargado de anglicismos y su visión de futuro, Alonso representó el intento de modernización de Telefónica.
En su despedida, el Consejo de Administración de Telefónica ha agradecido su "gran impulso a la transformación digital" y su papel en iniciativas como Open Gateway. Durante la transición, Alonso seguirá asesorando a Sebas Muriel.
Promesas de cambio, resultados moderados
Desde su llegada como Chief Data Officer en 2016 y luego como Chief Digital Officer, Alonso protagonizó grandes apuestas tecnológicas que, en muchos casos, se quedaron lejos de la revolución esperada:
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La Cuarta Plataforma (2016): prometía devolver el control de los datos a los usuarios y cambiar la relación entre operadoras y gigantes tecnológicos. Nunca despegó comercialmente.
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Aura (2018): un asistente virtual que aspiraba a competir con Alexa y Siri. Fue recibido con gran despliegue mediático, pero tuvo escasa adopción.
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Movistar Home (2018): un dispositivo con Aura integrada para el hogar. Comercialmente irrelevante.
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Open Gateway (2023): una plataforma para facilitar el acceso a las APIs de las operadoras, presentada como una gran apuesta financiera, cuyos frutos aún están por verse.
Entre la innovación y la cultura corporativa
Alonso, con su carisma y perfil mediático, llevó la bandera de la transformación digital en Telefónica. Sin embargo, la estructura corporativa de la compañía, con procesos lentos y jerárquicos, dificulto la materialización de muchos de sus proyectos.
La cultura corporativa de Telefónica, con sus procesos estratificados y toma de decisiones compartimentada, demostró ser un obstáculo para la transformación digital que Alonso intentó liderar. Mientras en Silicon Valley perfiles similares al suyo impulsan cambios radicales en la industria, en Telefónica el ritmo de transformación era más pausado.
La llegada de Marc Murtra a la presidencia ha supuesto un cambio de estrategia en la compañía. Con un enfoque más pragmático y discreto, la nueva dirección ha iniciado una reorganización que afecta a diversas áreas
El cambio de dirección en la teleco, con la llegada de Marc Murtra, parece haber acelerado su salida. Telefónica, que cumple 100 años, sigue en la encrucijada de definir qué quiere ser en el futuro. Y en ese camino, el show debe continuar, pero sin su hacker más famoso.
Veremos que nuevas aventuras le depararán al pirata que se hizo almirante tras naufragar en Telefónica al que le deseamos “Buenos Vientos·
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