1. Mejorar la experiencia de cliente: esta tecnología permite generar un diálogo personalizado según la realidad de cada persona, aportando información de valor para el socio, que de esta forma puede tomar mejores decisiones financieras. También ayudando a los gestores y gestoras a proporcionar un asesoramiento mejor y más cercano.
2. Como ocurre en todos los sectores, la IA reduce tiempos de ejecución y minimiza riesgos de errores humanos. Por ejemplo, permite una mayor fiabilidad del sistema de credit scoring o facilita la detección de intentos de fraude.
3. Gracias a la Inteligencia Artificial las entidades financieras y aseguradoras tienen mayor facilidad a la hora de analizar el comportamiento de los usuarios, lo que permite predecir modelos y ofrecer un servicio mucho más personalizado o diseñar productos y servicios acordes a las necesidades de cada momento.
4. El uso de la IA democratiza el acceso al asesoramiento financiero, ya que permite una relación más directa entre el usuario y la entidad, elimina las barreras físicas y permite atender de forma simultánea a más personas sin importar el momento o lugar en el que se encuentren. De forma generalizada, las entidades están apostando por el uso de chatbots que ayudan a los usuarios en el manejo de sus finanzas en lenguaje natural y ofrecen, por ejemplo, consejos de ahorro o formas de manejar una deuda.
5. Teniendo en cuenta las aplicaciones anteriormente expuestas, es una realidad que el uso de la IA aumenta el rendimiento de las empresas ya que supone un mayor conocimiento y comprensión de las necesidades de los clientes, que redunda en una mayor satisfacción. A su vez un incremento de la eficiencia, especialmente en la parte de análisis y atención al cliente, en la optimización de la gestión de riesgos o la mejora de los servicios ofrecidos.
La IA en el sector financiero: ¿qué opinan los expertos?
En el marco del acto de celebración del 15 aniversario de Caja Ingenieros Vida y Pensiones, expertos del sector como Diego Valero, presidente de Novaster; Mercedes Ayuso, catedrática de Estadística Actuarial por la UB y actuaria de seguros; Jordi Rivera, consejero de Caja Ingenieros Vida y Pensiones; y Marta Regina Cano, directora de Inteligencia de Negocio en Grupo Caja Ingenieros debatieron y reflexionaron sobre las posibilidades que ofrece esta tecnología en el ámbito asegurador y financiero. Todos ellos coincidieron en que se trata de una herramienta que debe incorporarse de forma paulatina, aunque medianamente ágil, y que requiere de un conocimiento técnico por parte de los profesionales que la implementan. Del mismo modo, los profesionales estuvieron totalmente de acuerdo en que los grandes beneficios que el uso de la IA puede generar en el sector solo tienen sentido si se aplican para mejorar la vida de las personas, aportando un valor añadido que mejore la salud financiera de todas aquellas personas a las que se presta servicio.
En este sentido, Mercedes Ayuso aseguró que “la IA permite un análisis exhaustivo de un gran volumen de información y un ajuste de los algoritmos a la situación de cada usuario, esto permite a entidades como Caja Ingenieros ofrecer un servicio mucho más personalizado y ajustado a la situación financiera de cada individuo”. Por su parte, el consejero de Caja Ingenieros Vida y Pensiones afirmó que “estamos ante el reto y la oportunidad de utilizar la IA para obtener información de calidad sobre el comportamiento de los usuarios, lo que nos permitirá mejorar la salud y la educación financiera en las actividades cotidianas de las personas”. En la misma línea, Marta Regina, experta en Big Data, señaló que “desde Caja Ingenieros estamos trabajando con la IA para interpretar datos del usuario como los ingresos o el tipo de gastos y para orientarlo a tomar mejores decisiones financieras a largo plazo o tener una previsión de ahorro más realista, siempre con el objetivo de impactar en la cultura financiera de nuestros socios y socias”. “Todo ello acompañado de un enfoque ético en el uso de los datos y los sistemas de IA, alineado además con nuestros valores como entidad cooperativa”, añadió Regina.
En conclusión, la aplicación de la Inteligencia Artificial en el sector financiero ofrece una amplia gama de beneficios. Los expertos reunidos en el evento de Caja Ingenieros Vida y Pensiones resaltaron cómo esta tecnología está transformando la manera en que se prestan servicios financieros, permitiendo una atención más precisa y accesible para los usuarios. En este sentido, la IA no solo impulsa la competitividad de las entidades financieras y aseguradoras, sino que también contribuye a fortalecer la salud financiera de las personas al proporcionarles herramientas más efectivas para la toma de decisiones. En un entorno donde la innovación es clave, la integración inteligente de la IA se presenta como un componente fundamental para el éxito futuro del sector financiero en la era digital.