Cooperativas estiman una cosecha de 20 millones de hectolitros, un 12% menos de vino y mosto en C-LM
La vid ha sufrido las consecuencias de una sequía persistente desde la vendimia anterior, con un invierno y primavera extremadamente cálidos y secos. Aunque hubo precipitaciones en junio, el verano se presenta con altas temperaturas y sequías continuas, superando los 40ºC, afectando especialmente a las zonas secas y dañando el desarrollo vegetativo.
La vid ha sufrido las consecuencias de una sequía persistente desde la vendimia anterior, con un invierno y primavera extremadamente cálidos y secos. Aunque hubo precipitaciones en junio, el verano se presenta con altas temperaturas y sequías continuas, superando los 40ºC, afectando especialmente a las zonas secas y dañando el desarrollo vegetativo.